Es en el juego interior donde radica la diferencia entre un hombre que se tiene que esforzar – hasta rogar – para tener mujeres en su vida y otro que, sin mayor esfuerzo y casi de forma inconsciente, tiene éxito con las mujeres.
Es en el Juego Interior donde radica la diferencia entre perseguir mujeres o atraerlas.
¿Y cómo mejoras tu Juego Interior?
Aquí quiero que hablemos de 7 hábitos (que no son los únicos, pero sí muy importantes) que te ayudarán a forjar un Juego Interior poderoso, confiado y sólido.
Recuerda que trabajar en tu mundo interior, en lugar de querer encontrar cosas externas como frases, rutinas o abridores de seducción, es poner tu foco de atención en el lugar correcto, es decir sobre ti mismo.
Esto te permite ser atractivo de forma natural, sentirte auténtico cuando interactúas con una mujer y sobretodo, sentirte libre de ser quien eres en todo momento.
Así que sin más, veamos estos 7 hábitos.
1. Haz ejercicio todos los días
Existen numerosos estudios que relacionan el ejercicio con la segregación de endorfinas, dopamina y serotonina, todas conocidas como hormonas de la felicidad y que te permiten estar de un mejor humor, más relajado y feliz.
Es por ello que considero que el ejercicio debe ser parte esencial de nuestros días. Y si ya te ejercitas con regularidad, te habrás dado cuenta que te sientes con un mejor ánimo, con más energías y ganas de hacer mucho más.
Y si no lo estás haciendo, entonces… ¿qué esperas?
Una grandiosa forma de empezar con este hábito y que no se sienta que estás haciendo un esfuerzo sobrehumano, que tarde o temprano hace que te desmotives y renuncies, es empezar de a poco, paso a paso.
No te obsesiones mañana mismo con ir al gimnasio a levantar fierros por 2 horas o salir a correr por una hora. No va funcionar.
Quieres ir de 0 a 100 y eso asusta a tu mente por el enorme esfuerzo, voluntad y disciplina que tendrás que aplicar para lograrlo.
Empezar con 10 a 15 minutos de ejercicio diario es mejor, y más inteligente, que esperar a tener las ganas y la disciplina para cumplir con rutinas más complejas.
A medida que el ejercicio ya no sea algo tan duro, que tu mente ya no lo perciba así, puedes subir el nivel. Ya no tendrás tanta resistencia para hacerlo.
2. Medita todos los días
Tener una sesión de unos 15 minutos de meditación cada mañana y antes de empezar con tu rutina diaria, te permite acallar esa voz en tu cabeza que nunca se apaga.
También te ayuda a entrar en un estado más presente, te ayuda a estar más concentrado y no dejas que preocupaciones de tu pasado o de tu posible futuro, te afecten.
Meditar te ayuda a estar en el presente.
Presente en las conversaciones.
Presente en tus actividades.
Presente en tu vida y eso te permite ser partícipe de grandes cosas. Cosas que quizás te estás perdiendo por no vivir en el aquí y en el ahora.
Por otro lado, la meditación llega a ser de un enorme beneficio para tu Juego Interior. A medida que lo vuelvas un hábito empezarás a tener un mayor control sobre tu mente.
Es así como serás capaz de crear una barrera a esos pensamientos y sentimientos negativos o de baja energía que te quitan la motivación o te hacen creer cosas limitantes sobre quién eres o lo que eres capaz.
Así que al igual que el ejercicio, no lo pienses más, empieza a implantarlo a tu vida.
3. Agradece todos los días
Jean de La Bruyère dijo una vez: “Solo un exceso es recomendable en el mundo: el exceso de gratitud”.
Tu Juego Interior se debilita o se vuelve uno sumiso y dependiente, cuando te concentras más en aquello que no tienes, en el tipo de hombre que no eres y en las cosas que no puedes hacer.
Respóndeme una cosa con total sinceridad:
Si te pidiera que hicieras una lista de las cosas únicas, positivas, maravillosas sobre ti mismo, ¿cuán larga sería esa lista?
A muchos les costaría un enorme esfuerzo llegar a 10 o 15, a otros le tomará algo más de tiempo.
Pero si te pidiera que hicieras una lista de aquellas cosas que detestas de ti, que no te gustan, ¿cuán larga sería esa lista?
Tal vez, un poco o MUCHO más larga que la primera, ¿verdad?
Es fácil ver lo negativo y limitante de nuestras vidas que lo positivo y único.
Si quieres construir un Juego Interior único, poderoso y sólido, la clave es concentrarte en esas cosas que si tienes y por las cuales puedes estar agradecido.
Cada día tienes un montón de cosas por la que puedes agradecer. Desde el simple hecho de poder levantarte de tu cama, pasando por el trabajo y el techo que tienes sobre ti y la comida que tienes en tu mesa.
Practica la gratitud y como lo mencione al principio, este si es un exceso que puedes permitirte.
4. Trabaja la aceptación
Una cosa me queda clara:
Es más fácil ponerse un par de sandalias que intentar alfombrar el mundo entero.
Una de las mayores frustraciones que experimentamos todos los días surge por la no aceptación de las cosas y de las personas.
Entendamos que las personas son como son y no hay nada (y tampoco es tu obligación o responsabilidad) cambiarlas o forzarlas a que vean el mundo como tú lo ves.
Nos frustramos porque las mujeres no son como nosotros quisiéramos.
Nos frustramos porque nuestros compañeros de trabajo o nuestro jefe no es más como nosotros.
Nos frustramos porque el mundo no es más como tú lo quieres.
Y eso cansa. Desgasta.
Quizás parte del problema proviene que poner demasiadas expectativas con respecto a una persona y lo que podría pasar.
Ves la situación como quieres que sea y no como es, eso hace que te obsesiones con la idea de algo que solo pasa en tu mente.
Una vez más: eso cansa.
Conoces a una mujer y por crees que hay algo de química con ella, la debes de llamar, la tienes que invitar a salir, quieres acostarte con ella. Pero ella no te responde y te da largas.
Y si te obsesionas con querer cambiar la opinión, decisión o acción de alguien, lo único que encontrarás será una pared de varios metros de alto que intentarás escalar a como dé lugar.
De nuevo: eso cansa.
Sé más práctico y acepta que las personas son como son y el mundo es como es y si quieres cambiar algo, mejorar algo, empieza por ti.
5. Expresa lo que te gusta de la gente que te rodea
Acostumbrarte a comunicar lo que te gusta de una persona no sólo mejora tu Juego Interior, sino que te hará sentir más conectado con las personas que te rodean.
Pero eso sí, hazlo desde lo genuino y honesto, no veas esta práctica como una forma de buscar agradar a los demás, endulzándoles el oído.
Expresar lo positivo de otras personas te convierte en un hombre más positivo, más asertivo y confiado, ya que no tienes miedo de expresar lo que sientes o piensas de otros.
Recuerda que donde pones tu foco de atención determina, y por mucho, el nivel de Juego Interior.
Es imposible concentrarte en lo negativo de ti o de otras personas y tener a la vez, un juego interior sólido y poderoso.
6. Deja de quejarte
Como dice el proverbio:
Si tu problema tiene solución, no tiene sentido preocuparte porque ya sabes cómo solucionarlo. Si tu problema no tiene solución, tampoco tiene sentido preocuparte por no hay nada que puedas hacer para remediarlo.
Pero, ¿cuántos hombres se quejan de sus problemas?
¿De su trabajo? ¿De las mujeres? ¿De su vida misma?
Quejarte debilita tu Juego Interior, y más que debilitarlo, lo destruye ya que cada queja te deja con una mentalidad de víctima y te orilla a la conformidad porque únicamente te quejas, pero no haces nada para remediarlo.
Así que deja de concentrarte en aquello que no puedes arreglar o cambiar, únicamente provocas frustrarte sin más.
Como ya te lo mencioné en un punto anterior, acepta lo que no puedes cambiar y lo que sí puedes cambiar, cámbialo, pero deja de quejarte.
7. Ten disparadores positivos
Cuando tu cerebro siente estímulos positivos te permite estar más relajado, más concentrado y positivo, todo esto te ayuda a construir un Juego Interior poderoso.
Es por ello que debes conscientemente tener disparadores positivos a lo largo de tu día que te lleven a ese estado.
Por otro lado, debes cuidarte y evitar lo más posible esos disparadores negativos, como noticias, ciertas publicaciones en redes sociales, personas negativas y lugares que no te agradan.
Ahora bien, estos disparadores positivos dependen de cada persona.
Para algunos, ver una película, cantar, tocar algún instrumento, leer, meditar, hacer ejercicio y demás los llevan a un estado de alta energía.
En mi caso me funciona mucho darme una ducha, leer acompañado de una taza de té o café o ver un capítulo de alguna serie que sigo.
Estas sencillas actividades que puedes realizar inmediatamente te ayudan a cambiar tu enfoque de uno negativo a uno positivo. Cosas sencillas que te ayudan a mejorar tu Juego Interior.
Así que allí los tienes, 7 hábitos que te ayudarán a fortalecer ese mundo interior que llevas y que determina tu mundo exterior y lo que estás obteniendo ahora en tu vida.
Espero que te sean de gran ayuda y sobretodo que los pongas en práctica.