¿Por qué estás leyendo esto?

Si te estás preguntando si debes o no insistir una chica, es porque en realidad sientes que hay algo que no va bien con esa estrategia.

Nos lo han dicho varias veces: “Quien la persigue la consigue”.

Pero, ¿esto es verdad?

Después de todo hay muchos hombres detrás de esa mujer que les gusta y lo único que consiguen es ser rechazados una y otra vez.

Si hoy te preguntas: “¿Cómo hago para estar con esa mujer?”

Pero no te preguntas: “¿Cómo está mi vida hoy?”, hay algo que no estás terminando de ver del todo.

Te hago esa segunda pregunta porque quiero que vayas más allá del simple hecho de preguntarte qué truco uso para conquistar a esa chica.

Y empieces a ver un panorama más completo, como una especie de zoom out para que te veas a ti mismo, tu vida, tu entorno y bueno… a esa mujer.

Y cuando haces esta introspección empiezas a darte cuenta de cosas que por mucho tiempo han pasado desapercibidas en tu vida, pero que se desencadenan cuando no eres capaz de conquistar a esa chica que tanto te gusta.

Me explico: una chica se siente atraída a ti en gran medida porque tú representas algo que ella anhela y desea. Y el deseo por naturaleza busca ser saciado.

Aquí encontramos nuestra primera máxima: si ella se siente atraída por ti, insistir está por demás.

Si tienes que recurrir a la insistencia para que ella se sienta atraída por ti (cosa que rara vez pasa) es porque a ella no le gustas. Punto.

Creer que la atracción se da medio del esfuerzo, es cómo creer que una planta crecerá más rápido si tiras de su tallo con fuerza.

Por más que te esfuerces con esa chica. Por más que intentes mostrar tu lado más atractivo, más genial o mostrar que eres el hombre que le conviene a ella – uno que haría cualquier cosa por ella – si ella no se siente atraída a ti, nada va a pasar.

La atracción no es una elección. Y si intentas crear esa atracción con regalos, favores y demás, logras el efecto contrario.

Insistir es sinónimo de miedo. De necesidad. De querer obtener algo de los demás por el medio que fuera.

¿Por qué insistes?

¿Por qué lo haces? ¿Por qué ella?

¿Por qué sientes que no debes dejarla ir y simplemente conocer más mujeres con quienes conectar mejor?

Porque en tu interior siente que te hace falta algo. Y ves en ella o en lo que puedes obtener de ella y de la relación una forma de llenar esos vacíos en tu vida.

Si lo pensamos bien, la seducción es un intercambio de valor. Descubrimos consciente o inconscientemente que la otra persona es valiosa y eso nos hace enamorarnos y desearle.

La seducción es interesada porque buscamos valor. No buscamos lo pobre, lo feo ni lo rechazado ni lo poco deseable. Por lo menos no de forma general.

Insistir es la antítesis de todo esto. Es hacer pasar lo poco valioso y deseable como la última Coca-Cola del desierto.

Y por ello la persigues, insistes y crees que nunca darte por rendido es una manera muy romántica de mostrar tu interés por ella.

Pero aquí se presenta nuestra siguiente máxima: insistir reduce tu valor.

Y cuando tu valor empieza a reducir, ya no estás insistiendo, estás regateando para no seguir perdiendo.

Perseguir a una mujer la aleja

Perseguir algo solo refuerza el hecho de que careces de ello.

Y esta es una idea que puede parecerte contra intuitiva. Pero ponte a pensar un poco en ello.

  • Las personas que persiguen obtener más confianza, son las más inseguras.
  • Los hombres que persiguen seducir a todas las mujeres, son los que menos éxito tienen en sus relaciones.
  • Las personas que buscan dinero rápido, son las que peor financieramente están.
  • Las personas que persiguen agradar a los demás son los que no se sienten cómodos ni consigo mismos.

Perseguir algo o alguien siempre va a ser un juego donde saldrás perdiendo. Si tienes que insistir a esa chica, ya estás entrando a la cancha con 4 goles en contra.

Insistir siempre te dejará en números rojos

Insistir te convierte en un vaso vacío. Uno que clama con desesperación ser llenado. Uno que busca desesperadamente  esa persona que lo saque de su miseria.

Bueno… tal vez exagere.

Pero espero que con esta exageración quede más claro.

Si te acostumbras a insistir, tal vez se dé algo. Quizás de tanto martillar el mismo clavo éste ceda.

Pero si tienes que insistir para que se fijen en ti, significa que no te valoran. Y si tú aceptas estar en un lugar o con una persona que no te valora, entonces tú tampoco te valoras.

Y eso siempre te llevará a estar en números rojos en tu vida y con los demás. En cuanto alguien más interesante aparezca en la vida de esa chica, tú quedarás relegado a un segundo lugar.

Deja de esperar que ella o cualquier otra persona le den color a tu vida. Deja de esperar alguien venga a rescatarte o te muestre lo valioso que eres.

Tú debes ser tu fuente para sentirte bien contigo mismo, para sentir confianza, para sentir ese amor que erróneamente quieres encontrar en los demás.

Seguramente lo has escuchado, pero quiero que lo escuches aquí: nadie da lo que no tiene.

¿Quieres ser más atractivo?

Deja de ser un desagüe y empieza a ser una fuente.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí